Llamamiento Palestina
Llamamiento
Palestina
Movimiento Global de Resistencia No Violenta a la política extremista y violenta del Estado de Israel
La situación actual en Gaza pone en evidencia, una vez más, el callejón sin salida y el horror en el que viven los palestinos. No podemos conformarnos con condenar a las dos partes ni esperar una solución, fruto de negociaciones directas, sin una implicación e intervención exterior fuerte y decidida. Adoptar una posición de falsa neutralidad o de espectador impotente implica, en el fondo, aceptar el dejar hacer y tener que reconocer, tras cada crisis, cada masacre, que la situación se deteriora, que las negociaciones de paz no han llevado a ninguna parte y que la suerte del pueblo palestino empeora cada día. El número de organizaciones que apoya al pueblo palestino en todo el mundo -y en particular en Occidente- es impresionante. Sin embargo, existe la impresión de que resulta muy difícil alcanzar un acuerdo y desarrollar una estrategia común. En los debates, se mezcla a menudo el análisis de las causas del conflicto con la explicación de los principios de la resistencia o incluso con los medios a utilizar o las soluciones a proponer. En esas condiciones resulta difícil fijar una base clara y común sobre la que elaborar un discurso, dirigir una acción multidimensional y constituir un frente unido y sólido. Por ello, hay que comenzar por formular un cierto número de principios con los que estamos en gran medida de acuerdo:
1. El conflicto israelo-palestino es en primer lugar un conflicto político (si bien existe una dimensión religiosa que implica respetar la igualdad en la libertad de culto para todos -judíos, cristianos, musulmanes- y la libertad de conciencia para todos, creyentes o no).
2. Hay un opresor (Israel) y un oprimido (el pueblo palestino).
3. La resistencia palestina es realmente legítima.
4. Los palestinos tienen derecho a un Estado y a la libertad.
5. La igual dignidad de los palestinos exige una igualdad de derechos y de trato, cualquiera que sea la solución considerada elegida.
6. Los palestinos expulsados de sus territorios tienen un derecho legítimo al retorno.
7. Nuestro compromiso se funda en un rechazo igual e incondicional de todos los racismos bajo cualquier forma (racismo antijudío, antiárabe, anticristiano o antimusulmán, etc.).
A partir de estos siete principios fundamentales, es necesario constituir colectivos locales, regionales y nacionales que determinen los objetivos prioritarios del movimiento de resistencia local/global. Los ejemplos de “colectivos” o “coordinadoras” en Inglaterra, Francia y en otras regiones (EE.UU. o Europa) deben multiplicarse a escala en todos los países y a través de todos los continentes, ya que el conflicto local israelo-palestino tiene innegables consecuencias globales sobre la realidad política y económica mundial. Estos colectivos regionales, nacionales e internacionales deberían tener como objetivos principales:
1. Difundir una información permanente sobre la situación en Oriente Medio (mediante páginas web, newsletters, conferencias, vídeos, libros, etc.) que contribuya a desarrollar y mantener una conciencia ciudadana sobre lo que está en juego en el conflicto, más allá de las situaciones de crisis y coberturas mediáticas.
2. Determinar los medios de resistencia no violenta a través del mundo (posibles boicots y coordinación de acciones concretas: manifestaciones, intervenciones ante políticos, etc.) que algunas organizaciones ya desarrollan, si bien solamente en tiempos de crisis con cierta sinergia.
3. Contribuir y movilizar el movimiento de solidaridad financiera para proyectos de desarrollo y reconstrucción (infraestructuras, escuelas, etc.)
Los últimos acontecimientos en Gaza y la actitud de los gobiernos de Oriente y Occidente nos han convencido de que la ampliamente extendida pasividad e hipocresía no posibilitarán encontrar una solución a este conflicto. Todo sucede como si el Estado de Israel, con el apoyo de EE.UU. y algunos gobiernos europeos, haya impuesto un estado de terror intelectual en el que nadie se atreve a hablar, decir la verdad, denunciar lo inaceptable. Sin embargo, los habitantes del mundo son cada vez menos ingenuos y es por ello posible sensibilizar y movilizar cada vez a más ciudadanos que rechazan sufrir un lavado de cerebro mediático o verse reducidos a ser meros espectadores impotentes. Es importante ahora clarificar nuestros principios, fijar los medios de resistencia y coordinar nuestras acciones. Algunas experiencias nacionales recientes prueban que este proceso puede generalizarse. Para ello, hacemos un llamamiento a las organizaciones que llevan años trabajando, a las nuevas asociaciones y a la ciudadanía a considerar como un imperativo la creación de este movimiento global, mediante colectivos y coordinadoras regionales y nacionales, presentando unos objetivos y un discurso claro, y proponiendo acciones comunes más amplias y eficaces. Es importante rechazar tanto las divisiones como la apropiación de los políticos: compartir principios básicos hace posible este compromiso común en el que las acciones deben reflejar la decidida voluntad de participar en esta resistencia global. Porque no podemos seguir siendo espectadores de la negación de derechos, de las humillaciones y de las atrocidades en Palestina, lanzamos el Movimiento Global de Resistencia No Violenta. Deseamos invitar a comprometerse en el Movimiento a personalidades públicas (intelectuales, artistas, etc.), activistas y ciudadanía del mundo, así como a las organizaciones preocupadas por la protección de los derechos y la dignidad de los individuos y los pueblos que rechazan permanecer pasivas frente al silencio cómplice de los Estados de Oriente y Occidente, mientras palestinos civiles son diariamente asesinados, encarcelados o humillados en los nuevos ghettos en que se han convertido los territorios ocupados bajo la política israelí de colonización y apartheid.
La movilización popular solo tendrá posibilidades de éxito si es internacional y global.
Primera Signatarios :
Karen Amstrong (UK), Moazzam Beg (UK), Tariq Ramadan (UK), Michael Hudson (USA), Tariq Modood (UK), Michael Warschawski (JERUSALEM), Jean-Claude Meyer (France), Fareed Elshayyal (UK), Syed Faiyazuddin Ahmad (UK), Jeremy Henzell-Thomas (UK), Wilfried Mourad Hoffman (Germany), Roger Abdul Wahhab Boase (UK), Elfatih A.A/Salam, International Islamic University Malaysia (Malaysia), Ahmad Abuljobain (UK), Iftikhar H. Malik (UK), Sergio Yahni (Jerusalem), Lea Tsemel (Jerusalem), Nassar Ibrahim (Beit Sahour), Ahmad Jaradat (Hebron), Harfiyah Haleem (UK), Françoise Duthu (France), Umar Chapra (Pakistan/Saudi Arabia), Tahir Abbas (UK), Rafik Beekun (USA), Louay Safi (USA) , Sheila Musaji (USA), Bob Crane (USA), Jafar Siddiqui (USA), Muqtedar Khan ( USA), Charles Butterworth (US), Jocelyne Cesari (USA- France), Istishhad Mousa (Canada), Yahya Birt (UK), M Nasir (canada),Dr.Mario Liguori Presidente I.T.I. Istituto Tributario Italiano Centro Studi di diritto e tecnica tributaria (Italia), Tarik Ramdani (France), Remi maliz (France), Nadia BITTAME (France), Jeanne-Marie El Mejjad Marrakech (Maroc), Sadeekah Saban - CT (South Africa), Homera Ansari (India), Zineb RABI ANDALOUSSI (France), Shaheryar Akbar (Pakistan-USA), Gemma Slack (USA), Amjad Saleem (Sri Lanka), David Burrell (USA), Dr Serena Hussain, Loubna Youssef, PhD. Cairo University (Egypt)
ORGANIZACIONES :
European Muslim Network, Présence Musulmane Montréal, Présence Musulmane Toronto, American Muslims of Puget Sound (USA), Collectif des Musulmans de France, Centre Culturel Tawhid, Trait d’Union
رد مع اقتباس
المفضلات